Ubicado en el corazón de los Alpilles, el pueblo de Baux-de-Provence es una joya medieval que transporta a sus visitantes al pasado. Conocido por su auténtico encanto y espectaculares panoramas, este lugar también alberga una de las experiencias artísticas más singulares de la región: las Carrières de Lumières. Descubra por qué este destino es imprescindible en cualquier viaje a Provenza.
Un pueblo medieval lleno de historia
Les Baux-de-Provence, clasificado entre los pueblos más bellos de Francia, seduce con sus calles adoquinadas, sus casas de piedra y su rico patrimonio histórico.
Château des Baux: Ubicado sobre un afloramiento rocoso, este castillo ofrece una vista impresionante del valle de Alpilles. Los visitantes pueden explorar sus murallas, sus máquinas de guerra medievales y profundizar en la tumultuosa historia de los señores de Les Baux.
El pueblo: Pasee por sus calles y descubra tiendas de artesanía, galerías de arte y restaurantes que ofrecen especialidades provenzales.
Consejo práctico: Visita el castillo temprano en la mañana para evitar la suciedad y aprovechar la luz suave para tus fotos.
Las Carrières de Lumières: una inmersión artística única
A pocos pasos del pueblo, las antiguas canteras de piedra caliza se transforman cada año en un fascinante marco artístico. Gracias a monumentales proyecciones digitales, las obras de los más grandes artistas cobran vida en las paredes de estas inmensas cavidades.
Una experiencia multisensorial: Proyecciones animadas, acompañadas de banda sonora